Vivo en silencio, esperando por ese día en el que una persona sea lo suficientemente comprensiva conmigo como para intentar estar conmigo y hacer que deje de ser un monstruo.
Simplemente, tengo lo que merezco. Un error tan grande como yo no merece nada. Y mucho menos amor o compañía humanas. Soy demasiado malo para todo eso, pero también lo necesito.
Es lo único que puede hacerme feliz. Pero también lo que está más lejos de mi alcance. Entiendo que nadie quiera estar conmigo, sería una aberración. No quiero que nadie pierda su tiempo de esa forma conmigo, porque no me lo merezco.
Este estilo de vida ya es mío. Es algo aprendido a lo largo de mucho tiempo solo, pensando en que si no fuera tan rematadamente desagradable, las personas podrían querer estar conmigo.
Ya no necesito encontrar a alguien que me quiera, si no simplemente a alguien que se quede lo suficiente como para que se de cuenta de mi existencia. Pero no, no lo voy a encontrar.
Llevo una carga sobre mis hombros mucho más pesada de lo que puedo soportar. La soledad. No sé cuanto tiempo voy a poder aguantarla. Me está aplastando, y hundiéndome en el pozo de negrura que es mi vida.
Esta es la vida de un error, mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario